Receta arrollado de Huaso

Aunque la base de su preparación es de origen Español, esta Receta de Arrollado de Huaso es todo un clásico de la cocina típica chilena, y una muestra del sincretismo culinario presente en nuestro país.

La chilenización de este plato tradicional ocurre en los años de la colonia española, cuando se preparaba utilizando condimentos de origen local, a excepción de la pimienta que era importada de Europa.
De esa forma al modificar sus ingredientes originales, se impusieron los propios de Chile, para así convertirse en un plato popular del campo criollo, obteniendo un destacado lugar dentro de la cocina tradicional Chilena.

INGREDIENTES
1 Kg pulpa de chancho
1/4 Kg. tocino
1/2 Kg. de cuero de chancho
1/2 Taza de vinagre
3 Dientes de ajo
1 Cucharada de sal
Pimienta y comino
2 o 3 Cucharadas ají rojo
Cordel (pita blanca)
4 Tabletas caldo de carne

MODO DE PREPARACIÓN
Para preparar esta Receta Tradicional Chilena de Arrollado de Huaso, comenzamos por cortar la pulpa del cerdo y el tocino, en tiras largas de 1 cm y medio de ancho aproximadamente, cortando ademas el cuero en tiras de 25 cm de ancho.
Preparamos ahora un aliño con el vinagre, la sal, la mitad del ají, la pimienta, el ajo machacado y el comino.
Colocamos entonces las tiras de pulpa, junto con el tocino y el cuero, en una fuente, y añadimos entonces este aliño, dejando la preparacion en la nevera de un día para otro.
Al día siguiente colocamos un trozo de cuero sobre una tabla, y sobre este añadimos alternativamente las tiras de pulpa y tocino, una al lado de la otra.
Pintamos con la salsa de ají a gusto, y colocamos otro trozo de cuero cubriendo la preparacion.
Enrollamos después dándole una forma cilíndrica, y amarramos con la pita formando un arrollado.
Lo dejamos cocer en 4 litros de agua hirviendo, a la que previamente le agregamos las tabletas de caldo de carne, de forma que el arrollado quede cubierto por el caldo por aproximadamente 2 horas hasta que este bien cocido.
Cuando este listo dejamos enfriar el arrollado de huaso en el mismo caldo, y al sacarlo lo escurrimos bien y terminamos pintándolo con el resto del ají rojo.